Generación 1991-1995
Secretario Académico
El Colegio de México
En Ciudad de México
Yo estaba interesado en las humanidades, pero en San Luis Potosí al inicio de los años noventa, no había muchas opciones. La carrera de Derecho, además de que me atraía por tratarse de una profesión con una identidad bien definida, se me presentaba como una carrera con un horizonte profesional amplio. Los especialistas en Derecho suelen ser verdaderos expertos en un ámbito profesional, pero al mismo tiempo, se trata de un tipo de profesión muy versátil.
Se juntaron algunas circunstancias personales y los atributos de la universidad: la formación que ofrecía en su curricula, sus instalaciones, la distancia desde la casa familiar, su orientación humanista, su costo, y desde luego, el personal académico que enseñaba.
La UCEM reunía un par de condiciones que me resultaron en ese momento atributos muy particulares: además de los mencionados, era una universidad con tamaño humano, es decir pequeña en cuanto a su matrícula. Por otro lado, era una institución de educación superior que, aunque entonces era muy joven, ya gozaba de un cierto prestigio entre los profesionistas del Derecho.
El ambiente estudiantil era genial.
Sin duda el principal logro es dedicarme a algo que me gusta, que es estimulante y que otorga recompensas materiales, pero sobre todo simbólicas. Son recompensas que, aunque no se dan frecuentemente ni en gran monto, son suficientes para mantener el interés por el trabajo.
Obtuve una formación en áreas del Derecho que, en aquel entonces, no se ofrecía en otras escuelas, pero, sobre todo, más que la transmisión de un saber, en muchas clases, lo que recibí como enseñanza fue un “saber hacer”. Se trató de una enseñanza con un grado considerable de formación en competencias y no solo en conocimientos.
Al concluir mi labor como secretario académico, seguir realizando mis labores como profesor-investigador en el Centro de Estudios Demográficos, Urbanos y Ambientales de El Colegio de México.
Combinar la enseñanza en el aula con actividades extramuros. Durante mi formación fue muy útil colaborar en despachos de abogados y en un par de tribunales.
Ingresé a la Maestría en Derecho, con especialidad en Derecho Constitucional y Administrativo de la UNAM. Luego a la Maestría en Estudios Urbanos en El Colegio de México. Al concluir ambos estudios, trabajé un año en el Centro de Investigación y Docencia Económicas y luego me fui a Francia donde estudié un Master en Administración Pública (Science Administratives), una Licenciatura en Filosofía y un Doctorado en Derecho.
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